Para ofrecer claridad respecto del uso de las tarjetas propietarias de una red gasolinera o gasera vehicular, habría que explicar en principio cómo funcionan:
Las tarjetas de
crédito de ciclo cerrado son emitidas por las redes de servicio de petróleo o
gas natural para su uso exclusivo en sus estaciones de servicio y
establecimientos afiliados.
Las tarjetas de crédito tipo “closed loop” para una red de estaciones de petróleo o gas natural generalmente son emitidas por la propia red de gasolineras o por una entidad financiera asociada a la red. Es decir, una empresa que tenga una red de gasolineras puede asociarse con una institución financiera como un banco, una cooperativa de crédito, una empresa procesadora de pagos o una compañía de tarjetas de crédito para emitir tarjetas de crédito de ciclo cerrado para sus clientes.
En algunos casos, la propia red de servicio de gas natural o petróleo puede actuar como emisor de la tarjeta de crédito de ciclo cerrado y tener su propia infraestructura para procesar pagos y gestionar los programas de recompensas y promociones para sus clientes. También pueden asociarse con una empresa especializada en la emisión y administración de tarjetas de crédito, que proporcionaría la plataforma tecnológica y la gestión de riesgos asociados con la emisión y administración de las tarjetas.
Este tipo de instrumentos son una efectiva estrategia comercial orientada a generar crecimiento para el negocio, ya que permiten obtener ventajas significativas. A continuación las 5 principales ventajas como estrategia de marketing de un negocio de venta de combustible:
1.- Programas de recompensas: Las tarjetas de crédito de ciclo cerrado pueden ofrecer programas de recompensas que permiten a los clientes acumular puntos o millas canjeables por descuentos, combustible gratis u otros incentivos. Esto puede fomentar la fidelidad del cliente y aumentar la frecuencia de compra.
2.- Descuentos especiales: Las empresas que ofrecen tarjetas de crédito de ciclo cerrado pueden ofrecer descuentos especiales para los titulares de tarjetas en la compra de combustible. Esto puede atraer a los clientes y fomentar el uso de la tarjeta de crédito de ciclo cerrado en lugar de otras formas de pago.
3.- Branding: Una tarjeta de crédito de ciclo cerrado personalizada con la marca del negocio puede aumentar el reconocimiento y la fidelidad de la marca. Los clientes pueden sentirse más conectados con el negocio y más propensos a regresar para comprar combustible.
4.- Control de gastos: Las tarjetas de crédito de ciclo cerrado permiten a los negocios controlar y limitar los gastos de sus empleados en combustible mediante la asignación de límites de gastos y la restricción de las compras a proveedores específicos. Esto ayuda a evitar gastos excesivos y no autorizados.
5.- Análisis de datos: Los datos recopilados a través de las tarjetas de crédito de ciclo cerrado pueden proporcionar información valiosa sobre los hábitos de compra de los clientes, como el tipo de combustible que prefieren, la frecuencia de compra y la ubicación de la compra. Esta información puede utilizarse para mejorar la estrategia de marketing y la satisfacción del cliente.
En general, una estrategia de lealtad utilizando tarjetas de crédito de ciclo cerrado puede ser una forma efectiva de mejorar la experiencia del cliente, aumentar la lealtad y las compras repetitivas, además de recopilar datos valiosos para mejorar la estrategia comercial de la empresa.